Velas: historia, simbología, significado según colores y rituales

El hombre, desde hace milenios, se ingenió para conseguir no solo calor o luz sino también para crear objetos a los cuales atribuir un significado o una simbología sagrados. De alguna manera siempre ha buscado un símbolo que le conectara espiritualmente a Dios o a la Madre Tierra o bien a su más profundo Ser.

O bien que sirviese para honrar templos, altares, cementerios, lugares de culto, para iluminar el camino de las plegarias y de los deseos interiores; para rituales de todo tipo.

Se cree que el hombre prehistórico utilizaba piedras huecas en donde ponía aceite o grasa animal que dejaba arder para así iluminar las cuevas y poder dibujar jeroglíficos.

En Egipto se encontraron porta-velas que remontan alrededor del 1600 AC. Además se encontraron velas de grasa de ballenas en la tumba del emperador Qui Shi Huang, de la dinastía Qin (siglo II AC).

Los romanos fabricaban velas con mechas utilizando rollos de papiro empapado en cera derretida o cebo, tratándolas que su consumo fuese lento. Se narra que el emperador Constantino utilizaba velas para honrar la Pascua en el lejano siglo IV.

En el siglo XIII, tanto en Inglaterra como en Francia, había grupos de productores de velas de sebo y de cera de abejas organizados en agrupaciones gremiales.

Fue a partir del 1800 cuando se empezó a experimentar el uso del cebo refinado y se empezó a producir velas con distintos materiales (cera obtenida del aceite de ballena, parafina refinada etc.).

Simbología

La vela, en su entereza, representaría las distintas dimensiones del hombre:

– la cera simboliza el cuerpo físico

– la mecha simboliza la dimensión mental

– la llama simboliza la dimensión espiritual

De allí se atribuye también un significado a medida que la vela se va consumiendo y según la forma y el movimiento de la llama.

La vela representa al ser humano, la cera al cuerpo físico, la mecha a la mente y la llama al espíritu. Por ello, a través de la observación de su evolución cuando se quema, podemos ver e intuir los resultados.

Una vela encendida no sólo sirve para iluminar, como era costumbre en la época en la que no existía la energía eléctrica. Relacionada con los elementos naturales, la vela es símbolo de movimiento, fuerza y energía.

La cera se relaciona con el elemento Tierra que se transforma en el elemento Aire que da vida al elemento Fuego cuya llama, una vez encendida, genera el elemento Agua una vez se vaya quemando y consumiendo.

Los colores y los rituales: significados más comunes[1]

Amarilla: dinero, devoción, abundancia, buena suerte

Anaranjada: concentración, claridad mental

Azul: paz, armonía, bondad

Blanco: descanso, comunión, pureza, espiritualidad, altar

Celeste: paz, entendimiento, paciencia

Dorada (y amarilla): negocio, poder espiritual

Moradas: concreción y soluciones

Marrón: amistad

Roja: amor, pasión, dominio, fuerza, deseo sexual

Rosada: armonía, dulzura, amor sublime

Verde: dinero, negocio, prosperidad

Violeta: espiritualidad, meditación, calma, transformaciones

Plata (y gris): dinero (petición)

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Vittoria Veri Doldo ~ Health Coach

[1] http://relatosmitosehistorias.blogspot.com.es/2013/09/las-simbologia-de-las-velas.HTML