¡Adiós 2020, ha sido difícil pero lo hemos conseguido!

El año pasado en este articulo daba la Bienvenida al 2020, llena de buenas sensaciones y un grado de comprensión diferente.

Ahora, al ponerme a redactar este articulo, he vuelto a leer lo que escribí hace un año. Fue antes de que explotara la pandemia, los problemas, el caos, el dolor, la incertidumbre, el confinamiento y todo lo que ha acarreado el Covid19.

¡Y me he quedado impactada! Sin saberlo, adelanté lo que necesitaba hacer para enfrentarme a todo lo que ha pasado hasta ahora. Me dije a mi misma que lo más importante era la actitud, la forma de vivir las cosas que ocurren. Porque queramos o no, va a ocurrir lo que tenga que ocurrir. Y concluía diciendo que la vida no me dejaría sola durante estos 365 días que han pasado.

Y así ha sido…

Nunca me he sentido sola, ni abandonada. Al contrario y pese a todo lo que ha podido pasar, me he sentido protegida, arropada, confortada cuando perdía la esperanza, y sostenida cuando el agobio y el desconcierto se apoderaban de mi mente.

Los momentos difíciles fueron pues ‘momentos’. Y pese al haber padecido y estar padeciendo (como tod@s) las consecuencias del covid19, he sido muy pero que muy afortunada.

Porque tanto yo como todos mis seres queridos estamos bien. Y pese a que no he podido reunirme con ell@s, he tenido la suerte de poder mantener un contacto constante y diario. Hemos hecho lo que hemos podido. Y lo hemos aceptado, que es lo más importante.

Porque pese a que la economía ha cambiado y no ha sido ni es estable, estoy bien, he podido seguir con mi vida. Y las limitaciones en la que haya podido incurrir han sido manejables. Estoy bien. ¡Estamos bien!

No me ha faltado de nada. De nada que no fuese verdaderamente importante.

Y sobre todo, no me ha faltado Amor ni salud ni trabajo. 

Así que, Querido 2020, tengo que darte las gracias por todo lo que me has dado. Si, gracias a pesar de todo.

Porque realmente he podido vivir estas circunstancias adversas con buena actitud, con fortaleza mental y con la suficiente capacidad para ver la realidad no como nos la cuentan en las noticias. Sino más bien como la siento, en mi interior.

Porque al final este mundo necesitaba una buena bofetada para PARAR. Para PERDER. Para SENTIR.

Sentir que no tenemos el control de nada.

Que todo puede cambiar en un instante.

Y que lo que cuenta es lo que nos hace sentir vivos, amados, lo que nos hace sonreír, lo que nos hace recordar, lo que nos hace vibrar, lo que nos permite sentirnos libres. ¡Ser libres!

Gracias 2020 por haberme confinado en mi casa. Porque he podido reconectar con muchas cosas aparcadas, olvidadas. Y gracias a esto superar miedos, construir las bases de un futuro que quiero que sea diferente. Mejor. Porque yo quiero ser mejor persona.

Quiero querer mejor, quiero sentir mejor, quiero actuar mejor, quiero vivir mejor. Quiero estar conectada con el mundo, el mundo de verdad. Este mundo lleno repleto de buenísimas personas que cada día tienen la valentía de levantarse y volver a empezar.

Si, todas estas personas que de verdad admiro, que pese a haber vivido perdidas de seres queridos que se han ido de este mundo solos; pese a haber perdido sus trabajos, su seguridad, su esperanza, allí están: ¡luchando y avanzando!

Porque nos hicieron creer durante demasiado tiempo que el bienestar es económico. Que el éxito es tener una posición social vinculada a las posesiones materiales.

Nada más erróneo que esto.

El éxito es ser uno mismo, respetarnos y respetar a los demás. Aceptarnos y aceptar. Que la vida es avanzar, pase lo que pase.

Pero avanzar. 

Si 2020, a parte de darte las gracias, comparto contigo la palabra que marcará este nuevo año para mi: ¡Avanza!

Y si me lo permites, quiero dedicar un poema maravilloso a Todas las personas que han perdido un ser querido a causa del coronavirus. Y por supuesto a los casi 2 millones de personas que han abandonado este mundo, esta dimensión y que quizás estén en otra, más bonita, observándonos y cuidándonos.

Porque nadie se va del todo hasta que tenga un rincón en nuestro corazón y en nuestros recuerdos.

Así que te pido que, pese a todo lo que has pasado, pese a todo lo que aún nos toca vivir durante el 2021, ¡AVANCES!

Y recuerda: todo lo que perdemos vuelve a nosotros de otra forma. ¡Créelo, créeme! No pierdas la esperanza, ¡AVANZA!

~

Carta Desde el Cielo

No he muerto!

Solo me fui antes

y no quiero que me recuerden con lágrimas

como aquel que no tiene esperanza.

No he muerto,

aunque mi cuerpo no esté,

siempre mi presencia se hará sentir.

Seré el silencio de nuestro hogar que tanto compartimos,

seré la brisa que besará sus rostros,

seré un recuerdo dulce que asista a su memoria,

seré una pagina bonita de su historia.

Perdón a todos,

tomé únicamente uno de los trenes anteriores

y se me olvidó decirles.

No estoy muerto, solo me fui antes

~

Poema atribuido a Sir David Thompson

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Un fuerte abrazo para Tod@s los que me habéis acompañado por este medio durante este año. Espero seguir Avanzando con Vosotros!

Gracias, siempre.

Vittoria Veri Doldo