La lecitina de soja es una sustancia orgánica que recubre las neuronas y protege las membranas de las células. Se encuentra pues en alimentos ricos en colesterol como varios tipos de aceites, pescado, yema de huevo, nueces de Brasil, muchos vegetales y por supuesto en las semillas de la soja y sus derivados.
Contiene principalmente colina, ácidos grasos y fosfolípidos y es una grasa vegetal que aporta y ayuda la correcta absorción de vitamina B, E, A, C y varios minerales como calcio, fosforo, hierro, magnesio entre otros.
Se produce en el hígado y es absorbida por la sangre – una vez pasa por el intestino – contribuyendo a la metabolización de la grasa.
Se puede consumir en granulados, en polvo, liquida o en capsulas. Sirve como emulsionante en la preparación de varios alimentos ya que les aporta textura y sabor. Se puede consumir junto con zumos, leches, yogures o en ensaladas, salsas y postres.
Principales beneficios
- Protege las células limitando su prematuro envejecimiento
- Fortalece y nutre el sistema nervioso
- Ayuda a bajar los niveles de los triglicéridos y a disminuir la absorción del colesterol
- Evita el endurecimiento de las arterias
- Mantiene la sangre más fluida y previene la formación de coágulos
- Favorece los procesos digestivos y la absorción de los nutrientes
- Ayuda a metabolizar la grasa nociva de los tejidos adiposos
- Suaviza los estados de estrés y favorece la concentración y la memoria
- Reduce la sensación de fatiga
- Protege el hígado
- Purifica los riñones
Dosis
Se pueden consumir entre 7g y 11g al día (2 o 3 cucharaditas dos veces al día). Si se consuma en capsulas/perlas, dependerá de la cantidad en mg presente en cada capsula/perla (considerar un consumo diario de entre 250gm a 500mg, normalmente 1 o 2 capsulas al día).
Sus beneficios se pueden apreciar siempre y cuando se siga una dieta variada y sana y un estilo de vida equilibrado.
Contraindicaciones
Su consumo no es recomendable en caso de embarazo y lactancia ni en persona que sean intolerantes o alérgicas a la soja.
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