Albóndigas de apio: ¡sorprendentemente sabrosas! (Aptas para celíacos+opción vegana)

Ingredientes para 4 personas:

• 1 manojo de apio con hojas
• 150 gr de harina de garbanzos
• 200 gr queso ahumado – el tipo que más te guste; o bien tofu aromatizado, si prefieres la versión vegana
• 1/2 cucharadita de cúrcuma
• 50 g de semillas de sésamo
• leche de mijo
• aceite de oliva virgen extra
• sal
• pimienta

Lavar a fondo el apio y separar los tallos de las hojas. Filetear los tallos, uno por uno, y cortar en trozos pequeños.
Hervir los tallos con sal; después de unos 20 minutos añadir también las hojas. Cocinar hasta que se ablanden.
Una vez hervidos, dejar enfriar en un colador para que suelten toda el agua. Luego escurrir bien, apretando para que pierdan la humedad que queda.  

Precalentar el horno a 180º (Si lo prefieres, en lugar de cocinar las albóndigas en el horno, puedes freírla en una sartén con aceite de oliva virgen extra).

Verter el apio en un bol y añadir las semillas de sésamo, la cúrcuma, sal, pimienta y la harina de garbanzos. Ir añadiendo la leche de avena según la masa sea más o menos seca. (Puedes añadir también 1 huevo por si te parece o prefieres un compuesto más compacto).  Amalgamar todos los ingredientes e ir montando las albóndigas  – en forma de bolitas del tamaño de una nuez o bien como pequeñas hamburguesas – teniendo cuidado a dejar un hueco en el centro donde pondrás un cuadradito del queso ahumado que has elegido. o bien del tofu. Trabaja la albóndiga para que el queso quede dentro en el centro de forma que, al cocinarla, no salga y se disperse.

Cubre un molde con papel de horno y añádele aceite de oliva (una cucharada bien distribuida). Pon las albóndigas – si quieres puedes añadir un poco más de aceite a hilo por encima – y déjalas cocinar unos 25 minutos (nota: el tiempo de cocción puede variar según el tipo de horno).

Si prefieres otra opción que sigue siendo saludable, puedes cocinar las albóndigas en una sarten. Viertes un chorritos de aceite de oliva virgen y extiéndelo hasta los bordes de la sarten, absorbiendo la cantidad en exceso. Aplasta un poco las albóndigas para que su cocción sea más uniforme. Vuelta y vuelta y ¡a disfrutar!

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Vittoria Veri Doldo ~ Health Coach